Sólo sé...

No sé que puede ser esto. Extraña sensación que se apodera de mi cuerpo, regalándome un nudo en la garganta, entregándome la incomprensión de todo lo que me rodea… Si supiera lo que es, lo reprimiría al instante, pero la curiosidad me mata, y quiero saber a qué se debe la sensación de que, a pesar de estar de pie, algo importante se ha caído, ¿pero qué?

Hace ya algunos meses, puedo estar segura de que no lo amo, que ya no hay vínculo que me una a él, más que una rota amistad que pasó a ser aquellos polvos en la mesa que vemos cada vez que la limpiamos, sacando lo que queda de ellos.

Estoy segura de que no me he enamorado. Y también estoy segura que no seré de nadie… ¿por qué pareciese que, cada vez que decido hacer algo, nada es como debería ser? Supongo que es por aquella inseguridad que siempre ha estado a mi lado… y para ser honesta, no le atribuyo esa situación más que a eso… Inseguridad, quizás por eso estoy tan segura de esas cosas. ¿Quién entiende?

No es que sienta que me pierdo, porque no lo hago, simplemente estoy mirando el laberinto… este tortuoso y maravilloso camino que a mi mirada se levanta en silencio.

A veces, antes de dormir, los brazos se me duermen acalorados, cierro los ojos con fuerza, tratando de olvidar todo lo que sucedió, tratando de borrar lo que pudo haber sucedido… En seguida me duermo, como si el calor de mis brazos jamás hubiera existido.

Detesto esta situación, esta sensación de no saber qué siento.

Y también detesto mirarme al espejo, esta su rastro, como si me siguiera y me dijera que así seré o que así soy, y que solo él me conoce… Imaginaciones mías, pero ¿cómo negarlas? No quiero, no quiero.