jueves, enero 29, 2015

Estar solo

Hace ya tres semanas que salí de vacaciones. En el trabajo fue un año parejo, muchas cosas mejoraron( tuve buenos y felices momentos) como algunas otras se fueron oscureciendo en un torbellino de negatividad (del que al parecer soy la líder), cahuines, malas palabras y varios dolores de cabeza, sin embargo a lo que quiero llegar es al título de la entrada. Estar solo. ¿Qué significa estar solo? ¿solo de soledad? ¿solo de solamente? ¿solo de compañía? y como estoy ad portas de cumplir 25 años con algunos sueños o metas cumplidas, más me aterran las variaciones del "solo". La verdad es que me di cuenta que sí estoy sola; en cuanto a soledad, a solamente y a compañía... Y pese a que MIL VECES he dicho lo mismo, no hago cambios, y siempre me pregunto porqué. LLevo deprimida 3 semanas en esta región de cemento, y con eso me doy cuenta que mi trabajo me distrae de mi misma y lo extraño... extraño hacer clases y compartir con mis alumnos, extraño reír, enojarme... No me gusta estar tan consciente de esta realidad... ¿por qué no me dejo ver? ¿a qué mierda le temo?. No tengo y tengo amigos... digo que tengo porque siento aprecio por ciertas personas que están dentro de mi vida, pero como están lejos de la misma (más física que espiritualmente) digo que no los tengo, así que de esa forma, no espero nada de nadie y me sorprendo de sus apariciones fugaces y tranquilas... así siento que realmente, no necesito a nadie (aunque solo sea una cortina de mentira). A veces pienso que todo sería más fácil si no hubiera hecho tantos cambios, no me sentiría tan sola en todo sentido. Comíamos en el mall con mis padres y mientras me reía con ellos le dije a mi mamá: Para mi cumpleaños, te pido un marido, no un pololo, me estoy convirtiendo en él - señalando a mi papá. Él dijo que a mi edad había conocido lo mejor de su vida (mi mamá) y me dio pena... pues yo no he conocido a nadie y tampoco siento nada. Mi mamá respondió que debía hacerme la tonta, que era muy inteligente para un hombre promedio de mi edad, y lo odié, ¿cómo negarse a una misma por el deseo de compartir? Sólo me reí y me decepcioné, no de mi mamá, sino de la vida... Hace un par de días caminábamos por Santiago con un amigo de alma pero no de espacios, y me dijo que las cosas estaban complicadas, que la gente ya no se esmeraba por conocer a otro, estaban inmersos en la superficialidad de la gente, nadie quería... ser, todos eran prototipos iguales y él estaba asustado. Solo correspondí a sus palabras con un: que queda para mi... soy todo lo que nadie podría querer. Él me sonrió, me dijo que era todo lo que alguien podría desear, pero que, y que él se sentía igual, yo no parecía hecha para este tiempo, esta época... Solo suspiré, así me he sentido toda mi vida, sin pertenecer a ninguna parte... Ya no lloro sola, y creo que es un avance, pero aún así... estoy asustada de mí misma. No quiero estar sola, pero tampoco quiero salir ¿para qué? ¿para encontrarte nuevamente contigo misma pero en la calle? ¿caminando, esperando que el tiempo simplemente pase? estoy aterrada. Me refugio en mi familia, en mis libros, y en palabras que no digo en voz alta. Y me compadezco, y me siento patética. Encontré una perfecta para esto que siento... y casi la respuesta también. :)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Aunque prometi no volver, no pude contenerme despues de lo leido.

te dejo unas letras ya sabidas por todos pero no hace mal repasarlas un poco.

No encuentras la felicidad y es tan fácil, sólo debes escuchar a tu corazón antes que intervenga tu cabeza, que está condicionada por la memoria, y complica todo con cosas viejas, con órdenes del pasado, con prejuicios que enferman, que encadenan, la cabeza que divide, es decir, que empobrece, la cabeza que no acepta la vida es como es, no como debería ser.
Haz sólo lo que amas y serás feliz, y el que hace lo que ama, está benditamente condenado al éxito, que llegará cuando deba llegar, porque lo que debe ser será.A ti debes hacerte libre y feliz, después podrás compartir la vida verdadera con los demás. Recuerda a Jesús: “Amarás al prójimo como a ti mismo”.

Reconcíliate contigo, ponte frente al espejo y piensa que esa criatura que estás viendo es obra de Dios; y decide ahora mismo ser feliz porque la felicidad es una adquisición.Si escucharas al otro, al que llevas dentro, sabrías todo. En todo encontrarías algo para tí, entonces te elevarías constantemente y ya no habría confusión sinó matices, y en esa serenidad no buscarías nada, entonces encontrarías todo-